¿Sabías que existe una fobia a los quesos? Si alguna vez has sentido incomodidad delante de algún alimento en concreto o notas que no eres capaz de probarlo, no estás solo. En este artículo vamos a hablar sobre la turofobia, qué es exactamente y cuáles son sus síntomas para poder identificarla. ¡Empezamos!
¿Qué es una fobia?
Para empezar, vamos a explicar qué es exactamente una fobia. Según la Real Academia Española de la Lengua, su significado concreto es: «Aversión exagerada a alguien o algo». Es decir, un miedo irracional muy difícil de controlar que se puede tener a objetos, alimentos, acciones, personas…
La turofobia: el miedo al queso
¿Por qué se llama turofobia? Viene del griego, de las palabras tupi (que significa queso) y phobos (que significa temor o miedo).
Pero este miedo no viene de la nada, no aparece de repente. Normalmente, se llega a esta fobia por culpa de un momento traumático con este alimento que suele suceder en la infancia. Puede ser por diferentes razones, estas son algunas de las más comunes:
- Una intoxicación: Si tras haber consumido este alimento en alguna comida se ha tenido un problema gástrico grave.
- Un atragantamiento: Es una de las causas más comunes de este medio, suele venir originada de un atragantamiento grave con sensación de asfixia en una edad temprana.
- Un empacho: En este caso, el empacho debería ser algo importante para poder llegar a causar la fobia.
- Una asociación: Esto sucede cuando estás viviendo un muy mal momento en tu vida y el queso aparece en ese recuerdo, sientes que te hace daño tenerlo cerca. Suele ser por el fallecimiento de alguien importante o por algún accidente concreto.
También puede ser causada por un trastorno de ansiedad que acabe desembocando en este miedo. Eso sí, es importante saber identificarlo para poder tratarlo, ya que con el tiempo las fobias cogen fuerza y luego es más complicado llegar a superarlas.
Qué síntomas tiene este miedo
Saber identificar los síntomas del miedo al queso es importante para poder empezar a tratar el problema e ir mejorando con el tiempo. Te explicamos a continuación qué se puede sentir con esta causa.
Ataques de pánico
Los ataques de pánico cuando el queso aparece en escena son una de las señales más evidentes de que algo está pasando con este alimento. Estos pueden conllevar a tener dolor en el pecho, sensación de malestar, hiperventilación, palpitaciones o sensación de asfixia entre otros.
Náuseas y mareos
Este síntoma puede confundirse con otros problemas, pero es una de las alarmas que nos dice que existe una fobia. Suelen ir ambos de la mano, es muy raro que aparezca uno solo.
Pensamientos distorsionados
¿Qué son los pensamientos distorsionados? La mente es libre y en muchas ocasiones actúa por su cuenta. Este tipo de pensamientos son aquellos que aparecen de forma totalmente incontrolable y que nos causan una sensación de malestar alta. Suelen ser breves pero muy dañinos.
Sensación de irrealidad
La desrealización es un síntoma más de estas fobias. Es cuando empiezas a sentir que lo que estás viviendo no es real o que te parece muy extraño como para creerte que está pasando de verdad.
Otro tipo de fobias a los alimentos
¿Hay alguna fobia más a algún grupo de alimentos? Estas son algunas de las más famosas.
- Lacanafobia: el miedo irracional a los vegetales. Puede ser solo a uno o a todos.
- Micofobia: en este caso es el terror a consumir setas y hongos por el posible envenenamiento asociado a algunas variedades de los mismos.
- Neofobia: es la fobia a probar cualquier alimento nuevo que no se conozca.
Cómo se pueden superar estos miedos
Con trabajo, los miedos se pueden superar. Lo que pasa es que en ocasiones confundimos la meta a la que queremos llegar. Superar la turofobia no tiene como objetivo el comer queso en un espacio corto de tiempo, sino evitar que este problema conlleve a otro tipo de trastornos emocionales e incontrolables que puedan afectar a tu vida. Por eso, hay que tener claro que la constancia y la calma son las bases principales para poder superar un problema así.
¿Cómo se supera la fobia al queso? La terapia psicológica es la mejor manera de poder superar cualquier problema relacionado con los miedos. En el caso de este tipo, se suele llevar a cabo un tratamiento congnitivo-conductual para poder aprender a distinguir los pensamientos distorsionados con el queso y empezar a controlarlos. El principal objetivo de la misma es tener conciencia de que este ingrediente no supone ningún peligro ni va a causar ningún tipo de daño.
Como puedes ver, la fobia a los quesos es una realidad con la que conviven muchas personas. Ahora ya sabes que hay diferentes miedos a según que clase de alimentos y también que hay formas de superarlos.